La Administración por Objetivos (APO) ó Administración por Resultados, es la Gerencia Participativa por Excelencia.Podríamos definirla como un Proceso que se basa, principalmente, en la definición de Objetivos y Metas, con su correspondiente asignación para su cumplimiento y cuyo desempeño, es evaluado en función de los resultados obtenidos.
¿Gerencia Participativa?
• La Elaboración del Objetivo, su enunciado y definición, es sin duda, una labor y un compromiso conjunto entre el Supervisor y su Supervisado, ambos participan activamente en el proceso.
• Con carácter cuantificable (numérico), toda Unidad Organizativa elabora sus Objetivos, con tiempos finitos, predeterminados y necesariamente medibles, la APO se fundamentada, principalmente, en la elaboración de Objetivos por niveles Jerárquicos dentro de la Estructura Organizativa de la empresa. Se recomienda definir de cuatro a ocho objetivos (como máximo) para cada posición.
• La Interrelación, como punto clave, debe necesariamente existir entre los Objetivos de los diferentes departamentos, ya que todos al unísono, apuntan, como punta de lanza, a satisfacer la Planificación Estratégica. Esa Interrelación involucra tanto Objetivos Funcionales como Objetivos de Producción, es decir, TODOS los Objetivos de la Empresa.
• La necesaria elaboración de los Planes Tácticos y Planes Operacionales, con énfasis en el Seguimiento y Control. A partir de los Objetivos de cada unidad Organizativa de la empresa, el Supervisor y Supervisado elaboran los planes tácticos, adecuados para alcanzarlos, convirtiéndose en instrumentos para el trabajo diario. Tal como lo estipula la APO, haciendo énfasis en la cuantificación, la medición y el control (ojo, no se debe confundir, Control por Objetivos con Gerencia por Objetivos), se hace necesario medir los resultados y compararlos (deltas) con lo previsto en la planificación. Todo aquello que no puede ser medido no puede ser controlado y todo lo que no puede ser controlado no puede ser mejorado.
• La Evaluación permanente, la revisión, la retroalimentación y el necesario reciclaje de los planes son unas de las grandes fortalezas de la APO.
• El carburante y la principal carta de Presentación de la APO es precisamente la interrelación Supervisor – Supervisado.
• Es fundamental el constante y necesario apoyo por parte de la Alta Gerencia. Durante las primeras etapas del proceso, la frase “hágalo usted mismo” está prohibida y fuera de lugar, OJO, se debe tener cuidado con la delegación, tenga siempre presente que la APO, exige categóricamente, coordinación, interrelación e integración de esfuerzos.
El conocimiento NO es propiedad privada de NADIE, ES y categóricamente, NOS PERTENECE a TODOS.
Salvatore Tarantino
sIG sistema Integrado de Gestión
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